Esta segunda etapa,
precedida del reblandecimiento, puede durar de cuatro a seis semanas. Nos
encontramos ya con la articulación fácilmente movible en el caso de las
rodillas, hacia la línea media. Los espacios articulares son simétricos en el
sentido horizontal, pero aun tienden a regresar al ángulo externo o interno anormal
de la articulación fácilmente.
En el genu valgo, los
espacios articulares están cerrados en su ángulo partiendo el vértice en la
región externa de la articulación de la rodilla y abierta en la cara interna.
Puede o no ser en las dos rodillas. Este defecto se acentúa más en el paciente
con gonartrósis.
En los niños en
crecimiento, no se pueda identificar radiológicamente con facilidad este
defecto ya que sus articulaciones están en desarrollo y maduración. Solo se
expresarán en los casos muy severos, por lo tanto, nos debemos de concentrar en
el resultado de la clínica del paciente.
No hay articulación que
no pueda ser alineada, esto se logra gradualmente y con fuerzas contrarias a la
deformación. La plasticidad de las articulaciones es tal que, siempre tienden a
volver a su alineación fisiológica si somos persistentes, metódicos y si
contamos con la autorización del paciente o sus familiares.
Esta fase se complementa
con higiene postural estático y dinámico. Yo lo complemento con plantillas
supinadoras generalmente dotadas de un virón corrido interno o externo desde la
punta hasta el talón y de cinco a ocho milímetros de espesor, lo que facilita
al paciente, alinear sus piernas a la hora de caminar o estar de pie con los
tobillos juntos. Lograr que cada paso que da el paciente se vuelva terapéutico.
Una persona, de acuerdo
a su estatura y edad, en un periodo de ocho a 12 horas, da alrededor de cinco a
10 mil pasos, más si su trabajo es desplazarse de un lugar a otro o si practica
algún ejercicio como correr. Yo aprovecho esta situación, para colocarle los
elementos alineadores necesarios durante su rutina laboral o de ejercicios.
Si sumo los efectos de
reblandecimiento y alineación articular en el periodo comprendido de cuatro a
ocho meses, puedo pasar a la siguiente fase.