LAS PRESIONES SOBRE los PIES del FETO.
El útero mide
aproximadamente siete centímetros de longitud, conformado por músculo en su
mayor parte. En medio, existe un espacio dónde habrá de implantarse y
desarrollarse el embrión, mide unos milímetros de espacio y el producto de la
gestación mide menos que ese espacio en general, algo así, como si estuviéramos
en una bodega vacía que a medida que van pasando las semanas de gestación, se
agregan elementos que se expanden (placenta, líquido amniótico, movimiento
pendular) pero aún estamos cómodos ya que hay mucho espacio antes de las doce
semanas de embarazo. Después de las doce semanas de gestación, se inicia un
crecimiento gradual: más crecimiento del cuerpo del feto, mayor tamaño de la
placenta, más líquido amniótico, más movimiento de acomodamiento fetal. El
útero se adapta a este crecimiento y crece hasta diez veces su tamaño promedio
(de siete a 70 centímetros) ya los movimientos fetales son más evidentes. En
ocasiones, el feto está incomodo o más presionado a sus casi 50 centímetros de
longitud y tres kilogramos de peso. Cuando las malas posturas del feto son
permanentes por mucho tiempo en los pies, estos toman la forma característica
del pie equino varo (curvo, hacia adentro y comprimido) e involucra a la
articulación del tobillo pero…SIN actuar en los HUESOS ya que éstos son muy
pequeños aún pero, sí en las
articulaciones. Entonces el niño nace con la forma característica de Pie Equino
Varo o Aducto Uni o Bilateral pero con los huesos del pie en desarrollo y
crecimiento, todos y cada uno de ellos presentes pero mal acomodados por la
presión y postura a la que fueron sometidos durante el embarazo. Solo bastará
hacer lo correcto para encausarlos a la normalidad SIN CIRUGÍAS.
Biografía: http://drpiecitos.wix.com/sincirugias