La escoliosis (en griego: skoliōsis,
de skolios, "torcido") es una desviación del raquis que tiene
como resultado que la columna vertebral de una persona se curve de lado a lado.
Aunque es una compleja deformidad tridimensional, en una radiografía vista
desde atrás, la columna vertebral de una persona con escoliosis típica puede
verse más como una "S" o una "C" que una línea recta.
Generalmente se clasifica en congénita (causada por anomalías vertebrales
presentes al nacer), idiopática (de causa desconocida, sub-clasificada a su
vez como
infantil, juvenil, adolescente
o del
adulto según la fecha que de inicio se produjo) neuromuscular (habiéndose
desarrollado como síntoma secundario de otra enfermedad espina bífida,
enfermedad motora de origen cerebral, atrofia muscular de origen espinal o un
trauma físico. El concepto parece ser tan simple de
aplicar.
En el caso de las escoliosis secundarias a Desproporción de Miembros Pélvicos inferiores, por lo general, el profesional de primer contacto recomienda al paciente que adquiera una ortesis compensadora del tipo de las taloneras con los milímetros que son necesarios o un arreglo en la plataforma del calzado. El profesional da por hecho que de ésta forma está ayudando al paciente.
El mismo paciente se siente ya compensado y seguro con ésta adaptación hasta que vuelve a sentir molestias otra vez, acude con el mismo u otro profesional de la medicina o con algún técnico ortesista y repite la misma solución.
Si desde el principio no se evaluó el grado de escoliosis o se tomó en cuenta éste efecto secundario en la columna Lumbar con evidencia radiológica, observaremos lo siguiente: primero, que los milímetros iniciales de desproporción pélvica han aumentado a razón de un mm por cada cuatro a seis meses en forma silenciosa, es decir sin sintomatología para el paciente. En ese momento, el profesional decide compensar con más altura la talonera o la suela del calzado del paciente sin darse cuenta que la escoliosis es cada vez mayor a la inicial. Por lo anterior: NO PERMITAS TOLERANCIA de NINGÚN MILÍMETRO de DIFERENCIA DESDE EL PRINCIPIO aunque te lo recomienden, no te confíes a las estadísticas ni a la buena voluntad de las personas.
Segundo: Cuando el paciente ya acude con sintomatología secundaria en su columna, es que el grado de escoliosis ya originó una radiculitis que se denomina Lumbalgía, término que no representa un diagnóstico sino una sintomatología.
Entonces, recomiendo tratar las descompensaciones pélvicas en formas protocolaria en búsqueda de escoliosis lumbar mediante control radiológico y tratarla en caso de que se detecte ésta con método de Rehabilitación a la experiencia de cada profesional y NO TRATARLA EXCLUSIVAMENTE con ELEMENTOS COMPENSADORES en CALZADO.