LOS CALLOS
Dentro de las dudas que existen, una de las preguntas que me hacen es la de las callosidades o
fibrosis de los pies. Molestia muy frecuente y algunas veces incapacitante para
la deambulación. Wikipedia la define así: La hiperqueratosis, vulgarmente
denominada como callo o dureza, es una zona de la piel en la que se
produce una acumulación de queratina correspondiente a la compactación de células muertas
inertes de la epidermis en respuesta a un estímulo que puede
ser, generalmente, el roce o la fricción excesiva. Las callosidades son más
comunes en la zona del pie o de la mano dependiendo la actividad o factor en el
cual haya surgido el callo. Es un mecanismo de defensa de la piel, que en los pies
suele asociarse a patrones de marcha y funcionamiento de los pies anómalos, que
provocan que determinadas zonas del pie se vean sometidas a sobrecarga, siendo la
respuesta de la piel
la formación de hiperqueratosis. Los callos en los pies son un signo de
sobrecarga que debe ser valorado por el podólogo.
El tratamiento convencional para eliminar las durezas es la quiropodia o
eliminación mediante bisturí. Una vez retirada la hiperqueratosis
la piel queda completamente sana, pero el factor etiológico, que es el
funcionamiento anormal del pie, sigue estando presente, por lo que el problema
vuelve a aparecer pasado un tiempo. Por esta razón, el tratamiento debe encaminarse no sólo a eliminar manualmente estas
durezas, sino a buscar el mecanismo etiológico que las origina y compensarlo,
generalmente mediante unos soportes plantares (plantillas) confeccionadas a
medida.
En otros casos, están relacionadas con el roce excesivo del calzado
(sobre todo en las zonas dorsales del pie) o con la presión de dos estructuras
óseas sobre la piel que las separa (como ocurre con los helomas o
hiperqueratosis interdigitales). (WIKIPEDIA)
Hay cerca de 770,000 menciones
en internet al respecto.
En lo particular y como lo
menciona en Wikipedia, yo manejo el método preventivo y el etiológico. En base
a un estudio de plantigráma dinámico observo los sitios de mayor apoyo plantar
y la dinámica de los ortejos o dedos de los pies. Cambio los zapatos de acuerdo
a cada caso, promuevo plantillas con elementos alineadores contrarias a los
puntos de mayor apoyo y los casos más rebeldes se los envío a mis amigos los
Podólogos, por lo regular mi método es muy eficaz y difícilmente hay
reincidencias. No recomiendo quitar las callosidades desde el principio si no
hacemos antes un protocolo sobre el origen o causa de las fibrosis que generalmente
lo es el calzado inadecuado y las malas alineaciones de los pies.
Habrá muchos criterios al
respecto siempre pensando en el beneficio del paciente, así que, bienvenidos
todos siempre y cuando no sea más agresivo el tratamiento que el problema.